Sitios arqueológicos de Tula
La zona arqueológica de Tula se encuentra a 80 kilómetros al norte del Distrito Federal y a unos diez minutos en autobús desde el centro de Tula de Allende. El yacimiento arqueológico forma parte del Parque Nacional Tula, que es un área natural protegida.
Dos son los complejos arquitectónicos que constituyen el principal atractivo de Tula:
Tula Chico: Posee una plaza alrededor de la que se encuentran distribuídos los principales edificios del conjunto. La Plataforma Norte alberga las dos principales edificaciones religiosas, conocidas como Pirámides Este y Oeste. Además, esta plataforma contiene los restos de una sala hipóstila que guarda semejanza con el Palacio Quemado de Tula Grande. Tanto en las salas de la Plataforma Norte como en las de la Plataforma Este se han encontrado relieves que probablemente representen a los nobles de la ciudad, muertos en batalla.
Estos monumentos muestran evidencias de que la ocupación de Tula Chico concluyó con la destrucción del conjunto por incendio hacia el final del Epiclásico (s. IX d.C).
Tula Grande: Compuesta por:
Centro ceremonial: Fundado por los toltecas alrededor del año 900 d.C. En la actualidad se puede observar los restos del templo de Tlahuizcalpantecuhtli o templo de la estrella de la mañana, en cuya cúspide se yerguen los famosos Atlantes de Tula, estatuas de 4,6 metros de altura, representaciones de dioses toltecas, que se cree eran los pilares del techo del adoratorio dedicado a Quetzalcoatl, por lo que se cree que los Atlantes simbolizan a su ejército.
En los Atlantes se observa el escudo que tienen en el pecho, un símbolo mítico, ya que la figura de Quetzalcoatl tenía dos formas de manifestarse: la serpiente emplumada y la mariposa o Papalotl.
Por otra parte se encuentran las Pilastras ubicadas detrás de cada uno de los Atlantes. Contienen representaciones que parecen alusivas al enfrentamiento entre Quetzalcóatl y Tezcatlipoca, su eterno rival de acuerdo con la mitología nahua. En la Pilastra 3, hay representaciones de dos personajes ataviados de guerreros que portan símbolos distintivos de Tezcatlipoca y Quetzalcóatl. Sobre este último se encuentra una representación de Tláloc, señor de la lluvia.
La mayor parte de las esculturas que coronan este edificio fueron halladas durante la temporada de investigaciones encabezada por el arqueológo Jorge Acosta, él y su equipo fueron los primeros en investigar sistemáticamente la zona arqueológica en 1941.
El Coatepantli o muro de culebras: Construcción decorada con relieves de piedra policromada, algunas de las cuales representan serpientes que devoran cuerpos humanos descarnados.
El Palacio Quemado: Consta de plataformas con restos de columnas de planta cuadrada y círculos, que forman un corredor con la pirámide, y el juego de pelota, en el que se observa un relieve que representa a un jugador y una estatua de portaestandarte.
Se han localizado seis juegos de pelota en toda la zona arqueológica: tres en la plaza principal o cerca de ella, y tres en la plaza a la que se denomina Tula Chico. Tienen un gran parecido al juego de Chichen Itza.
El Chac-mool: Frente al Palacio Quemado, figura reclinada de un sacerdote en cuyo pecho descansa un recipiente en donde se depositaban las ofrendas a los dioses.
La pirámide del sol: Formada por cinco cuerpos separados por angostos andadores, lo que es visible desde varios puntos de los alrededores.
La Zona Arqueológica se puede visitar de lunes a domingo de 9:00 am a 17:00 pm.
Museo Arqueológico Jorge R. Acosta: Ubicado a un costado del acceso principal a la zona arqueológica de Tula y está dividido por secciones:
-Primera sección: muestra a través de mamparas, una reseña histórica de las personalidades dedicadas a la investigación de la zona arqueológica de Tula. Con planos se ilustra la ubicación de los edificios, las áreas de excavación y el área de montículos, así como también en maquetas se describe la ubicación geográfica de la cultura tolteca.
-Segunda sección: trata la organización política y social de los Toltecas. En vitrinas se exponen relieves con el símbolo de la guerra, relieves de águilas devorando serpientes así como la figura de un sacerdote. En piedra hay un estandarte con figura humana y un jaguar, y en barro hay figurillas humanas.
-Tercera sección: expone la religión tolteca y las costumbres funerarias. Para ello, en vitrinas se exhiben restos humanos y piedras labradas con el símbolo de Venus y la representación de Quetzalcoatl, como estrella de la mañana. Hay una vasija de barro con púas, utilizada en los sacrificios y un bracero con la figura de Tláloc.
-Cuarta sección: enfocada en la arquitectura tolteca, en ella se describen el juego de pelota y el Edificio Coatepantli. Aquí se muestran remates arquitectónicos, restos de columnas serpentinas y los pies de un atlante.
-Quinta sección: vasijas de cerámica sencillas y trípodes.
-Sexta sección: se exponen puntas de lanza, puntas de proyectil y raspadores, así como molcajetes, una cabeza de soldado, collares, orejeras y narigueras.
-Séptima sección: se describe la economía tolteca, así como el abandono de la ciudad y la salida de Quetzalcoatl; para ello se observan objetos de concha y hueso, vasijas, instrumentos musicales y pendientes de cobre y cerámica mexicana hallada en el lugar.
Colaboración: Angie
Excelente entrada ... muy didáctica. Me gustó muchísimo porque además, me enteré de cosas que no conocía. Gracias Lunita !!!
ResponderEliminarCuando todavía iba al colegio (hace muuuchos años! je!) hice una investigación muy profundo respecto a este tema, allí nació con forma de curiosidad lo que hoy es pasión hacia esa cultura.
ResponderEliminarCoincido en lo que dice Mabel, en este artículo leí cosas que jamás había escuchado, eso se debe a la exelente calidad de las cosas que publicas!
Muchas Gracias Luna!!
Besos!