16 de marzo de 2011

Actualidad



Japón se prepara para una catástrofe nuclear

La situación en la nación asiática es desesperante. Las autoridades se ven sobrepasadas y piden ayuda internacional. 70% de posibilidades de un nuevo sismo superior a los 7°.

El gobierno japonés ha admitido por primera vez la gravedad de las explosiones en Fukushima. Las autoridades intentaban evitar el miércoles (martes de nuestro país) una catástrofe luego de que el viento llevó hacia Tokio bajos niveles de radiación expulsados tras explosiones en una planta nuclear dañada por un sismo, lo que causó pánico, huidas y filas para adquirir productos básicos en la capital.

Por su parte, André-Claude Lacosteel, presidente de la Autoridad de la Seguridad Nuclear de Francia, ha alertado que en Japón estaría empezando "una crisis que podría durar semanas" y no descarta que se llegue al nivel máximo de catástrofe nuclear y se pueda vivir un desastre similar al que se produjo en Chernobil. También ha dicho que algunos de los reactores de la central nuclear podrían estar a punto de sufrir ya la fusión de sus núcleos, si no se ha producido ya, debido a las altas temperaturas posteriores a las explosiones.


Según la agencia de seguridad nuclear de Japón, la explosión ha dañado el cofre de protección del reactor y ha provocado una fuga indeterminada de partículas radiactivas. Varias agencias de noticias japonesas, afirman que los niveles de radiación han superado el límite legal después de esta explosión.

Por otra parte, según el Instituto de Meteorología japonés, hay un 70% de posibilidades que en las próximas 72 horas vuelva a haber una sacudida, que sería de 7 grados en la escala de Richter. 

El riesgo de dejar el país sin luz ha llevado al Gobierno japonés a autorizar apagones programadas de tres horas a partir de este lunes. También ha pedido a la industria que reduzca la actividad, una medida excepcional que afectará ocho prefecturas y que se prevé que se alargue hasta finales del mes de abril.

Asimismo, la cifra de muertos se ha multiplicado después de que se han encontrado 2.000 cadáveres en la costa japonesa de Miyagi. Las cifras oficiales hablan de 1.800 muertos, pero la policía y los equipos de rescate tienen claro que aumentarán hasta situarse entre las 10.000 y 20.000 personas muertas.

Material radioactivo alcanzará Tokio pero no es dañino para el ser humano porque para cuando llegue allí estará disuelto", dijo Koji Yamazaki, profesor de ciencias medioambientales en la Universidad de Hokkaido.

"Si el viento se intensifica, el material volará más rápido pero también se dispersará más en el aire", finalizó.



Fuente: eldiario24.com